El día que decidas volverte millionario, a cualquiera que se lo comuniques te verán como un lunático, criticarán todas las posibilidades que has imaginado para lograrlo, te comerán vivo antes de que si quiera pudieras explicar un poco de tu plan.
¿Crees que los primos de Bill Gates creeyeron que su proyecto funcionaría? Claro que no!!! El millionario es quien cree en sí mismo y lleva a la práctica lo que sabe para ofrecer algo nuevo o diferente al mundo, el que propone y sueña con lo que quiere. El día en que estes convencido en que tus proyectos se convertirán en realidad, ese día vendrá, pero si las oportunidades se te siguen presentando y tú sigues sentado viendo cómo los demás lo hacen, este no es tu negocio. Debes tener la actitud y seguridad de que lograrás TODO lo que quieres.
¿Aún piensas esperar a que tu abuelita, tío, amigo, primo, mamá, perico o perro piense que este negocio si sirve? Perfecto, las pocas vacantes de éxito se te escurrirán de las manos, no esperes a que tu amigo o persona que invita a participar en negocios de multinivel se vuelva millionario, porque él puede no serlo nunca, tú eres el que tiene que hacer a diferencia, agregarle valor a tu persona y a tu trabajo. Sólo debes tomar los consejos de quien ya ha hecho lo que tú quieres lograr y lograrlo como ellos, el tomar la experiencia de muchos empresarios famosos, entrepeneur, etc ayudará a tu crecimiento, a aumentar la información que requieres para empezar con el pie derecho.
Le pedirías la receta de cocinar un pastel a alguien que nunca lo ha hecho?... Obvio no! Entonces no acabo de entender porque pedirle los consejos de negocios que generen mucho dinero en poco tiempo a alguien que nunca lo ha hecho ni la haría! Es por eso que yo escribo este blog, para que con el paso del tiempo, nos demos cuenta de cuántos errores uno comete al principio y poderselos evitar a otros.
Yo tengo mis valores personales muy claros:
Vivir todas las experiencias posibles.
Ayudar cuando se puede.
Nunca dejar de crecer y regarme de conocimiento.
Lealtad a mí misma.
Para recibir hay que dar. En unión al punto 2.
En base a esto tú debes ofrecer lo mejor de ti para recibirlo, no hay más opción desde mi perspectiva, aumenta tu valor pronto.
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